La terapia Gestalt nos puede ayudar a superar muchas cosas, porqué la vida es un camino maravilloso, pero lleno de todo, incluyendo situaciones imprevistas y etapas vitales que a veces no sabemos cómo gestionar, y nos provocan sentimientos como ira, tristeza, miedo, resentimientos, envidia, celos, culpa… O también cuadros de ansiedad, estrés, miedos, pánico, fobias, depresión, baja autoestima, timidez o inseguridad.

En este camino vital hay momentos muy dolorosos como la pérdida de las personas queridas, que comportan procesos de duelo. La separación de una pareja es otra etapa muy delicada y complicada de gestionar. Perder un trabajo o sentirse fracasado en algún proyecto nos provoca sentimientos de desmotivación, confusión, desorientación, frustración o insatisfacción. Y en todos estos casos la terapia Gestalt no puede ayudar a continuar adelante y a superar estos ciclos tan complicados.

Las enfermedades, especialmente las crónicas, el cáncer o las cardíacas, necesitan un proceso de aceptación, será necesario aprender a convivir con ellas. En estos casos un terapeuta nos puede acompañar y guiar para poder entender las causas, ya que la corriente Gestalt y la bioenergética considera que las dolencias de un adulto son la expresión de una parte negada e inconsciente de nosotros mismos, e implicarnos en el tratamiento de forma adulta y responsable. Superar y aceptar todo lo que conllevan se puede convertir en una forma de crecimiento personal.

También puede haber momentos en nuestra vida en los que nos sentimos perdidos, en los que creemos que nada de lo que nos rodea tiene sentido. En estos casos la terapia Gestalt nos puede ayudar a conocernos mejor y a iniciar un proceso de cambio profundo, que nos permita crecer como personas, encontrar un sentido a la vida y la sensación de vivirla plenamente.

La terapia Gestalt te puede ayudar de forma práctica, teniendo el presente como único escenario, a superar estas pruebas que nos pone la vida y a sentir que al hacerlo has encontrado algo en ti que te ha hecho crecer como persona.